Firenze

27. Tercer día y un reto visitar Florencia en unas horas...

 El mapa de callejuelas para llegar más rápido fue útil, aunque el tiempo jugó a nuestro favor y pudimos desgranar la ciudad en ocho horas escasas... la calor y las 6 horas de tren hicieron el resto jj.

Íbamos buscando el Duomo  pero lo confundíamos con una pequeña iglesia, ¿cómo? ni idea, dábamos vueltas y vueltas y acabábamos en la misma manzana... siguiendo una calle próxima pequeña y llena de carpas de mercadillo llegábamos a la plaza verde, como nosotros la bautizamos. 

Il Duomo es impresionante son varios edificios los que componen esta imponente plaza, es diferente de todo lo visto, curiosa y una belleza por su estado de conservación. Tan alta que era imposible hacer una fotografía de toda la fachada... una panorámica de todas su líneas. El color verde es característico, es una gama cromática preciosa y única. Acostumbrada a los ladrillos y las piedras de la cultura española es un arte muy diferente y chocante.

Dentro es bastante más austero de lo esperado desde fuera, gran altura, aire fresco y pudor a la hora de entrar son las líneas sobre su escondite. La cúpula principal es una gozada la verdad que muy interesante. 

La caminata siguió por el centro, tiendas preciosas de las que haré una entrada propia... cientos de escaparates.. marcas y marcas en las que me encantaría poder entrar. Sólo señoras mayores en las puertas mayores de cara y pellejo porque desde atrás parecían rozar los 20. 

- Pero si lo que se ponen les queda fatal!!! que me lo den a mi!!! (tras ver a  una octogenaria con un pretttiismo black dress de Dior - dos bolsas de Chanel con flor incluida y paquetes de joyas)

La verdad que un vestido de Burberry me hubiera sentado más que bien, pero seguiremos engañando al sentido de la vista y al del bolsillo.

Más adelante la Piazza della Signoria pudimos ver diferentes estatuas en una galería, llena de palomas. 



Ahí frente a la puerta del palacete se encuentra una copia del David y una escultura-fuente bastante peculiar. 

De allí en camino fuimos a ver los puentes, un puente lleno de tiendas de joyería y graffities que llegaba hasta el El Palazzo Pitti es un gigantesco palacio renacentista.

De vuelta caminata y hamburgesas para un regreso de agua con gas ;)))  Un viaje perfecto ;))

Fotografías con copyright © Patricia G. Photos