49. Cuesta olvidar cómo hemos vivido, cuesta sentir nuevas emociones.
La generación del yo también puedo debemos aprender a retroceder en la vida, es cierto; aunque con múltiples matices. Sólo se retrocede en lo económico una de las ramas de nuestra vida. La que llena los bolsillos pero no el día.
No debemos retroceder, ni perdernos, ni resignarnos como se suelen decir en conversaciones de imbéciles.
Nunca debemos aceptar la realidad debemos compartirla, saber qué nos hace felices y luchar por ello.

Yo decido mi hoy y mi mañana, y nunca cambiará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario